Загрузка страницы

La República de Platón (Libro 2) - El origen del Estado (Estados saludable, enfermo y purificado)

La crisis política de su tiempo llevó a #Platón a la conclusión de que debía diseñar un Estado diferente a lo que ya existía. Con la creencia de que tanto en el Estado como en el hombre hay un Bien, se propuso descubrir cómo es y por qué medios se puede alcanzar.

Platón llegó a la conclusión de que es a través del conocimiento como se puede llegar a la Idea del Bien, y que es el filósofo quien sabe cuál es su naturaleza. El desentrañamiento de esa naturaleza es la finalidad de #LaRepública, puesto que si los hombres conocen lo que es bueno y justo para ellos, lo desearán para sí mismos y para los demás.

Para tener una mejor idea de lo que es bueno y justo para los hombres, Platón hizo un paralelismo entre éstos y el #Estado, ya que si hay justicia y bien en los hombres, y un Estado está compuesto por estos, es lógico suponer que la naturaleza en ambos sea la misma, es decir, una sociedad buena y justa sólo podría existir si sus ciudadanos son buenos y justos.

Para descubrir las raíces de la #justicia y de la injusticia, Platón precisó necesario contemplar cómo nace un Estado y su evolución a formas más complejas. Es en el Libro II de La República donde, a través de un intenso diálogo entre Sócrates, Glaucón y Adimanto, se emprende esta búsqueda. En este proceso, Sócrates llamó a la primera forma de Estado la ciudad saludable, a la segunda la llamó la ciudad enferma o lujosa, y a la tercera la llamó la ciudad purificada o superlujosa.

La ciudad saludable nace porque ningún hombre puede satisfacer sus necesidades básicas por sí mismo, necesita de otros hombres para satisfacerlas. Para lograrlo, es importante que cada hombre se ocupe en una sola actividad. Según Platón, todos poseemos por naturaleza el talento para realizar una tarea. Desarrollar dicha tarea, especializarse en ella y perfeccionarla, es mejor que si cada uno tratara de satisfacer todas sus necesidades por su cuenta.

En la ciudad saludable todos intercambian sus productos por otros productos, todos trabajan para los demás y todos se benefician por ello. No hay pobreza, no hay guerras, no hay explotación. No se necesita un gobierno porque la ciudad saludable es justa por naturaleza; siendo un Estado pequeño, cada quién tiene su lugar en la sociedad, su propio arte, no sobra nada ni falta nada. “De este modo, pasarán la vida con paz y con salud, y será natural que lleguen a la vejez y transmitan a su descendencia una manera de vivir semejante”. (372d)

Glaucón llamó a esta forma de Estado la “ciudad de los cerdos” porque sacia las necesidades vitales del cuerpo, pero no satisface las necesidades del espíritu. Sócrates reconoce que la simplicidad de este modo de vida no refleja, ni la naturaleza verdadera del hombre, ni la vida buena que él quiere para la ciudad.

La decadencia de la ciudad saludable es causada por la ambición y el deseo de cosas innecesarias, dando lugar a la ciudad enferma, también llamada ciudad lujosa. Este Estado se caracteriza por el apetito ilimitado de riquezas y lujos, los hombres ya no realizarán solamente la actividad para la cual son aptos, sino cualquier otra actividad que les genere la mayor recompensa.

El crecimiento exponencial de actividades, y por lo tanto de población, pone en relieve la necesidad del Estado de expandir su territorio. Suponiendo que los Estados vecinos tendrán también esta necesidad, surgirán disputas entre estos dando pie así a las guerras. Obedeciendo al principio de que cada hombre debe tener una sola tarea, Sócrates apunta que un buen ejército debe estar integrado por hombres educados exclusivamente en el arte de la guerra. Es así como surge una nueva clase social: los guerreros.

La instauración de los guerreros supone el fin del Estado enfermo a causa del lujo y la avaricia para dar paso al Estado purificado o superlujoso. La necesidad de un gobierno y un ejército que ponga orden a los apetitos y las pasiones tanto afuera como adentro del Estado marca la pauta para erigir dos clases sociales con una reputación mucho más elevada: la de los guardianes de la ciudad y la de los gobernantes.

A partir de aquí, arranca la construcción de lo que es el Estado ideal platónico, puesto que en los libros siguientes de La República se edificará la herramienta fundamental para llevar a cabo la gran transformación de la sociedad justa: la educación.

Видео La República de Platón (Libro 2) - El origen del Estado (Estados saludable, enfermo y purificado) канала Daniel Ramírez-Matehuala
Показать
Комментарии отсутствуют
Введите заголовок:

Введите адрес ссылки:

Введите адрес видео с YouTube:

Зарегистрируйтесь или войдите с
Информация о видео
2 ноября 2020 г. 7:19:36
00:06:08
Яндекс.Метрика