Me busqué en Google y descubrí que estaba muerta

Era un día normal en la escuela cuando tuve que ir al consejero vocacional para hablar sobre la solicitud de ingreso a las universidades. Entré, súper emocionada y lista, porque me habían dicho que con mis calificaciones y logros todo lo que tenía que hacer era elegir. Mi consejera vocacional me recibió en la puerta de su oficina y me dijo: “¡Hola, cariño! Empecemos".

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Comencé a charlar una y otra vez sobre lo que quería hacer en el futuro, y luego ella llamó mi atención sobre los ensayos universitarios. Mis hombros cayeron y mi sonrisa colapsó. Uf, realmente no quería escribir uno. Comenzó a explicarme los diferentes temas de los que podía hablar, y supe lo que tenía en mente sin que ella tuviera que decirlo. Mi adopción.
"Realmente podría hacerte destacar", dijo.

Le respondí "Lo sé, simplemente no es algo de lo que hablemos en casa".

Esa interacción me recordó a cuando era pequeña y nadie creía que estuviera relacionada con mis hermanos. En las fiestas de cumpleaños, siempre me preguntaban "¿Dónde está tu mami?", cuando ella estaba junto a mí.

Mi adopción nunca fue un secreto, porque era obvio. Me veía completamente diferente a mi familia. Cuando llegué a casa, lo mencioné durante la cena. Mis padres se ahogaron visiblemente con la comida. ¿No fue raro eso? Quiero decir, es obvio para todos nosotros, ¿por qué es tabú? No quería que se sintieran incómodos, así que cambié de tema. Ahora, no imaginen que la conversación fue animada, no era así en mi casa. Incluso cuando era niña siempre estaba corriendo y tratando de vivir al máximo, mientras que mi familia siempre fue dócil y mis hermanos preferían caminar.

Después de la cena comencé a buscar en álbumes de fotos, los polvorientos en la parte de atrás de los estantes que nunca tocamos. Vi fotos mías de bebés y lo jóvenes que se veían mi mamá y mi papá. Empecé a buscar en los armarios y cajones, tratando de encontrar mis papeles de adopción o mi certificado de nacimiento. Cada vez que pensaba que finalmente estaba sacando el archivo que estaba buscando, no era así. Estaba revisando los papeles de mis hermanos, que mis organizados padres guardaban en la misma carpeta, pero faltaban los míos. ¿No fue extraño? Pensé que tal vez tenían el mío por separado, porque fui adoptada, pero ¿por qué lo harían? Estuve a punto de poner la casa patas arriba buscando esos malditos papeles, buscando en cada rincón de la casa. Nada. Estaba usando distraídamente en mi computadora portátil. Estaba estresada porque realmente queria hacer un buen ensayo universitario, cuando pensé, ¿por qué no buscar en Google? Quién sabe, tal vez pueda encontrar algo. Escribí mi nombre, sinceramente, no esperaba mucho, pero lo que vi cambió mi vida.

Había un sitio web dedicado a mí. ¡Yo! Pensé, ¿por qué alguien haría un sitio web para mí? Tenía mi nombre completo, mi cumpleaños e incluso el hospital en el que nací. Tenía que ser yo, no había forma de que alguien exactamente como yo naciera en el mismo hospital con el mismo nombre. Mis ojos se abrieron mientras leía el texto. ¡¿Yo estaba muerta?! ¡¿Cómo fue eso posible ?! ¡¿Estaba muy viva, sentada allí leyendo sobre mi muerte ?! Allí había fotos de mi familia, mi familia biológica. Todos se parecían a mí de una forma u otra, algunos tenían mi misma nariz y otros mi color y forma de ojos exactos. Pero me dieron en adopción, ¿por qué pensaron que estaba muerta? Mi cabeza daba vueltas, me sentí mareada.

Pasaron los días y me encontré mirando a esa familia todo el tiempo. Descargue la foto de ellos en mi teléfono y la miraba, preguntándome si también son como yo en personalidad. Mi hermana pequeña casi me atrapó mirando a este grupo aparentemente aleatorio de personas, pero rápidamente apague el teléfono. Incluso en mis sueños vi a estas personas. Soñé que volvía a casa de la escuela, pero que cuando abrí la puerta, estaba en un ambiente cálido y ruidoso, lleno de charlas animadas, y que encontraba a mi familia biológica en la cocina, preparando la cena juntos, como yo. Siempre he querido hacer con mi familia. Cuando desperté de ese sueño, corrí a la habitación de mis padres y los encontré viendo una película juntos.
"¿Por qué dice que estoy muerta en Internet?" Les pregunte. Vi la mirada que compartieron e inmediatamente supe que tenía razón al sospechar.
"¿Bien?" Exigí. Lo sé, sonaba malcriada al hablar así con mis padres, pero estaba asustada, y tenía razón.

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