Impresentable comportamiento de la reina Letizia en la Real Academia Española

¡VIVA LA MOJIGANGA DE PALABRERÏA EFESIA Y LA VANA JERIGONZA DE LOS FATUOS CON LEVITA Y MEDALLA!

¡ABAJO LA CULTURA POPULAR Y EL SENTIDO COMÚN!

¡VIVA LA CONTRAREVOLUCIÓN FRENTE AL ESPÍRITU DEL PUEBLO!

El principal problema que tiene la nueva funcionaria royal española, Letizia La Fiztizia, es no saber adaptarse al entorno monárquico, que es como decir al entorno de los ceremoniales propios de todo el entramado institucional caduco y clasista del régimen monárquico corrupto español. Hay instituciones especialmente absurdas y obsoletas, como es el caso de la Real Academia Española, donde una camarilla de vejestorios viven de un cuento pseudocientífico que no se creen ni ellos mismos, disfrutando del balneario, las regalías y los privilegios de semejante kiosko de vanidad fatua y ridícula. Para intentar autofinanciarse, han creado una suerte de fundaciones y mamarrachadas, siempre sin arriesgar nada y al abrigo del presupuesto público, contando con los títeres royales para ensalzar sus pretenciosas y cavernarias operetas. Uno de los baluartes de su financiación fue, en otro tiempo, las donaciones de dinero directas del monarca (hemos publicado un vídeo al respecto en este channel), que eran burdas aportaciones financieras del Estado sin control de ningún tipo, camufladas como una donación del parásito royal de turno que, con semejante disfraz de donante patriota, ensalzaba su prestigio y ocultaba su bajeza sinvergüenza y golfa. Otro mecanismo han sido los falsos patrocinios de las grandes empresas que, con semejante mecanismo, llamado por ellos con el pomposo nombre de mecenazgo cultural, consiguen sustanciosos beneficios fiscales y exenciones de impuestos, a la vez que la Real Academia les sirve de plataforma publicitaria gratuita. Y en último extremo está el mecanismo tradicional de negocio de esta absurda y periclitada institución, que es la edición de su diccionario de la lengua, diversificado en otras tantas versiones para ampliar el horizonte de ventas, como un denominado diccionario panhispánico de dudas (con el que tratan de copar el mercado latinoamericano), lexicografías, ortografías, diccionario de autoridades y otras soberanas estupideces que no interesan a nadie. Fieles a su espíritu oportunista, con ocasión del tercer centenario de la creación de la Academia, lanzan otra edición del diccionario, organizando a tal efecto una ridícula opereta a la que llevan a los más granados parásitos del régimen, así como a los lameculos de otros países de América del Sur, que ellos llaman académicos correspondientes, que disfrutan así de la oportunidad de viajar gratis a España, siempre al servicio de le lengua por supuesto, leer discursos cargados de fraude y mentira y pavonearse con sus medallas colgadas al cuello, nada menos que en compañía de los funcionarios royales del régimen corrupto, y toda su casta parásita.

Sin embargo, nuestra querida Letizia se puso en plan rebelde ante todos estos viejos babosos y parásitos, una actitud que es loable en cualquier mujer del siglo XXI, pero que no puede tolerarse en una reina consorte de España. La consecuencia es un cuadro lamentable, con una Letizia despreciativa, que se regodea ignorando a toda esa banda de inútiles, que tratan de utilizarla como títere para conseguir sus propósitos propagandísticos, con objeto de vender sus diccionarios que no interesan a nadie.

La uniformización del lenguaje, como instrumento de dominación colonial y cultural, tuvo a la actividad de esta banda de vanidosos como principal baluarte. Hoy día nadie les tiene en cuenta: la revolución de la mensajería de las redes sociales, la expansión de los anglicismos, el resurgimiento de las lenguas propias de las nacionalidades catalana, vasca y gallega y una sociedad más abierta que se expresa con libertad, han convertido a esta institución en un residuo para viejos jubilados, que pasan sus aburridas vidas pretendiendo imponer a los demás cómo deben escribir o hablar.

Debemos, pues, dar vivas y salvas sinceras a Letizia por haberse burlado de esta banda de inútiles, pero debemos admonizarla con severidad por lo que de antimonárquica y de aviesa badulaquería ha tenido su incompostura.

VIDEOGRAFÍA RELACIONADA:

-Cheque de un millón de pesetas entregado por el rey Juan Carlos a la Academia: http://www.youtube.com/watch?v=hs-pChra5J4

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