" Enamorados o esclavizados " entrevista a WALTER RISO
¿Qué es la 'liberación afectiva' que manifiesta el autor en su libro?
Es "la posibilidad de establecer un vínculo de amor saludable y sin ataduras a través del cual cada uno pueda desarrollar su libre personalidad, a pesar y por encima del amor". Es decir, la libertad individual es una de las condiciones claves para el amor sano.
¿Qué es lo que tenemos que cambiar en nuestra percepción del amor para mantenerlo y a la vez ser libres y felices?
Tenemos que amar manteniendo la propia libertad como la base del desarrollo personal, cree el psicólogo. La frase "no te necesito, te prefiero" es la primera fórmula del amor propio. Respetar la libertad de otro es la base de un amor sano, y respetar en este sentido significa aceptar "que el otro tenga sus propios amigos, actividades, sus propias preferencias, gustos y opiniones". Es, pues, una regla básica que a menudo olvidamos, lo que convierte nuestro amor en un 'amor opresivo'.
No menos importante es amar sin renunciar a la propia identidad personal. "No existo por ti, sino contigo" es el lema del amor no fusionado. A menudo un miembro de la pareja somete sus intereses a los del otro en aras del amor, y eso constituye un grave error. Si en una relación uno tiene que rechazar lo que significa que el otro "no ama o ama mal", porque "amar significa dejar que el otro sea como es y uno mismo ser como es". El sacrificio de haber renunciado a los propios intereses creará inevitablemente un resentimiento.
"No me vuelves loco/a, me apasionas" es la tercera receta del amor apasionado, pero sereno y no obsesivo. Si el amor es obsesivo "uno de los miembros de la pareja nunca está satisfecho con su relación, no puede hacer nada sin su pareja y demuestra una gran dependencia" cree el psicólogo. "Los que aman demasiado no soportan estar lejos de la persona amada ni un minuto" y esa actitud es el camino directo a la infelicidad.
El amor tiene que ser valiente, cree el autor, que invita a amar sin temer perder. "No ambiciono una eternidad juntos, sino la plenitud de ahora" es la última receta clave que propone. El miedo a perder al otro "trae consigo otros muchos miedos: el miedo a que la persona amada decepcione, a que el amor decaiga sin razón aparente, a que nos sean infieles y a que nos abandonen", apunta el libro. El miedo es, sin duda alguna, muy poco compatible con la felicidad verdadera.
Видео " Enamorados o esclavizados " entrevista a WALTER RISO канала Psiquis cuantica
Es "la posibilidad de establecer un vínculo de amor saludable y sin ataduras a través del cual cada uno pueda desarrollar su libre personalidad, a pesar y por encima del amor". Es decir, la libertad individual es una de las condiciones claves para el amor sano.
¿Qué es lo que tenemos que cambiar en nuestra percepción del amor para mantenerlo y a la vez ser libres y felices?
Tenemos que amar manteniendo la propia libertad como la base del desarrollo personal, cree el psicólogo. La frase "no te necesito, te prefiero" es la primera fórmula del amor propio. Respetar la libertad de otro es la base de un amor sano, y respetar en este sentido significa aceptar "que el otro tenga sus propios amigos, actividades, sus propias preferencias, gustos y opiniones". Es, pues, una regla básica que a menudo olvidamos, lo que convierte nuestro amor en un 'amor opresivo'.
No menos importante es amar sin renunciar a la propia identidad personal. "No existo por ti, sino contigo" es el lema del amor no fusionado. A menudo un miembro de la pareja somete sus intereses a los del otro en aras del amor, y eso constituye un grave error. Si en una relación uno tiene que rechazar lo que significa que el otro "no ama o ama mal", porque "amar significa dejar que el otro sea como es y uno mismo ser como es". El sacrificio de haber renunciado a los propios intereses creará inevitablemente un resentimiento.
"No me vuelves loco/a, me apasionas" es la tercera receta del amor apasionado, pero sereno y no obsesivo. Si el amor es obsesivo "uno de los miembros de la pareja nunca está satisfecho con su relación, no puede hacer nada sin su pareja y demuestra una gran dependencia" cree el psicólogo. "Los que aman demasiado no soportan estar lejos de la persona amada ni un minuto" y esa actitud es el camino directo a la infelicidad.
El amor tiene que ser valiente, cree el autor, que invita a amar sin temer perder. "No ambiciono una eternidad juntos, sino la plenitud de ahora" es la última receta clave que propone. El miedo a perder al otro "trae consigo otros muchos miedos: el miedo a que la persona amada decepcione, a que el amor decaiga sin razón aparente, a que nos sean infieles y a que nos abandonen", apunta el libro. El miedo es, sin duda alguna, muy poco compatible con la felicidad verdadera.
Видео " Enamorados o esclavizados " entrevista a WALTER RISO канала Psiquis cuantica
Показать
Комментарии отсутствуют
Информация о видео
Другие видео канала
¿Es posible amar sin sufrir?Aprende a liberarte de tu ex y reinvéntate en el amor - Walter RisoLa sabiduría y su poder para transformar mi vida.Tres pruebas para saber si estas con la pareja adecuada - Walter RisoV.Completa."La primera lección sobre amor es la dignidad personal”.Walter Riso, psicólogo y escritorWalter Riso sin miedo a decir la verdad en "Me Cansé de Ti"Principios para NO morir de amor - Entrevista con WALTER RISODesintoxica tu mente: el bienestar depende de ti - Walter RisoWalter Riso en Palabras MásEntrevista a Walter Riso en Abre los Ojos10 crueles verdades sobre el amor que nadie te ha dicho | Martha Debayle¿Por qué nos equivocamos tanto en el amor?Walter Riso | Desapegarse Sin Anestesia | Cómo fortalecer la independencia emocionalMás fuerte que la adversidad |Entrevista con Walter Riso | Dr César Lozano5 creencias que alimentan tu dependencia emocional - Walter RisoEntrevista con Walter Riso sobre su libro "Ya te dije adiós, ahora cómo te olvido”¿Por qué soportamos relaciones insoportables? - Walter RisoNueva guía práctica: Aprende a liberarte de tu ex y reinvéntate en el amor, del Dr. Walter RisoAmor Propio con Walter Riso, Conversaciones con Merce Villegas - Parte 1